7.2.09

Reyes de otros tiempos en las bolsas de mi pantalón

Contemplando el fuego en la oscuridad, mi espíritu fluye viéndola arder y viendo como el humo surge e inunda el espacio, trato de descubrir el espíritu en ella, sentir su vida y su relación con la mía, arder, y que mi sangre se evapore y fluya, desvaneciéndose y a la vez integrándose, incorporándose en el todo, inmersos en temperaturas ascendentes y sin escalas.

Y aunque la lluvia todo lo ha secado y tengo frío, sed y sueño, tan solo necesito reavivar el fuego, que la enfermera me traiga más vino antes de que sea demasiado tarde, después nos escabulliremos en la noche y le diré en el oído un poema, uno que hable de amor, que la haga resplandecer en la oscuridad y me muestre el camino.

Así, borracho y dispuesto veo desnuda a mi acompañante, su rostro se desdobla y sonríe sin preguntar… disfruta el fin de su melancolía a veces en silencio y a veces en gratificante agitación, finalmente se escurre ya sin pudor inflamada por mi insistente espíritu...

1 comentario:

  1. que hermoso se ve que amaste mucho a esa chika...chido ojala sigas escribiendo cosas asi...suerte

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